MIS GALLETAS DE AVELLANA

Hoy presento esta amistosa receta que he repetido varias veces y, aunque siempre con alguna variación, por eso de ir probando, siempre da buen resultado. Las he llamado simplemente galletas de avellana, por la sencillez, como el hacerlas, que resulta sencillo y encima no llevan nada malo para el body, sólo pura energía y amor para que el corazón bombee a toda popa! jajaja (me rio de mí misma porque me salen estas frases chorras que no me espero) Un poco de humor es indispensable, porque si no, la energía literaria no fluye..jaja

Pues esta receta originariamente se remonta a un taller con Elka Mocker en Barcelona, si, ella las llama «Galletas tipo Granola», pero he variado la receta a ingredientes mas sencillos, y alguna que otra variación.

Digamos que esta es mi receta base para hacer galletas, y, a partir de aquí, que cada cual dirija su velero..hay mil variaciones, mil maneras, que con chocolate, que con fruta, que sin avena, que si en forma de barritas…buff, estas galletas darán para más porque tengo una idea en mente, pero por ahora es un secreto.

Bien, voy a intentar explicarlo lo mas detalladamente posible, si se me escapa algo, no dudéis en preguntar.

Lo primero que hay que hacer es preparar:

-1 taza de avellanas crudas (mejor activadas)

-1 taza de avena integral (mejor germinada y deshidratada, yo la compro directamente así, porque no me vale la pena el jaleo de hacerlo)

-1 taza de trigo sarraceno (mejor activado y deshidratado, de la misma manera, lo venden ya activado)

-2cucharadas de sirope de agave (o cualquier otro endulzante sano)

-9 o 10 dátiles medjoul.

-1 pizca de sal. Repito, una pizquita chiquitita de sal.

-1/2 cucharada de vainilla en polvo

-1 cucharada de mezquite (opcional)

2 cucharadas de algarroba (opcional)

PREPARACIÓN:

Hacer harina del trigo sarraceno y la avena (no hace falta que sea perfectamente fina)
Trocear las avellanas en el robot de cocina o procesador.
juntar los dos anteriores y añadir el resto de ingredientes excepto los dátiles y trocear. una vez mezclado, añadir los dátiles. Esto crea una masa un poco pegajosa y hay que ayudarse de una pala para ir mezclando.
seguir triturando hasta obtener una bola.

5. extender la masa en un mármol, con un poco de harina de sarraceno para trabajar mejor y que no se pegue. El grosor, yo lo he dejado de unos 5 mm más o menos.

6. con cualquier molde con forma redonda, ir haciendo las galletas.7. una vez hechas las galletas, sólo falta deshidratarlas hasta que queden duritas y ricas! Eso lleva unas 12 horas, dependiendo de la deshidratadora.